jueves, marzo 06, 2014


http://www.eldiario.es/canariasahora/sociedad/Muere-poeta-Leopoldo-Maria-Panero_0_235876472.html
Ha muerto Leopoldo María Panero.

Y además de su turbadora poesía, de la fuerza de su locura y su cordura -en él no se distinguían como lo hacen en el resto-, recuerdo el día que fuimos a rescatarlo, como un komando terrorista-cultural de jóvenes dispuestos a asaltar la razón establecida, al manicomio de Mondragon (uno de tantos). 

Recuerdo aquellas horas lúcidas de coca-colas infinitas, de cigarrillos masticados y hasta me acuerdo de la tortilla de ajos tiernos que mezcló con las pastillas y que terminó por asesinarlo. Una pastilla que el médico insistió insistió insistió en que le diéramos y, el hombre de ideas oceánicas, de verborrea poética radical y situacionista, quedó sumido para siempre -para nosotros ya sería para siempre- en una de las formas de terror en las que el poder tiende a violarnos: quedó dormida su palabra, su aliento, su latido, su mente, su mirada...


Mi pequeña ofrenda en "Versos Sueltos":

"Me falta el oxígeno de tu Palabra: mi aliento."