basado en la transferencia de conocimientos y la educación mutua. Un laboratorio donde experimentar con nuevas formas de producción, aprendizaje y participación ciudadana." (+info)
Ya lo dicen ellos con bastante claridad. La inciativa es de Platoniq y es la prueba de que algo pequeño está transformando este mundo tan grande. Son las nuevas formas de la revolución: la e-volución!
lunes, noviembre 16, 2009
No es que no apoye
la liberación de los pescadores bermeanos. Pero antes de pedir más soldados, de desgañitarnos contra los gobiernos reclamando "nuestra seguridad" o la legitimidad de nuestros "pobres" barcos para seguir faenando... antes de llenarnos la boca con la basura con la que deforman nuestras mentes, estómagos y corazones... tal vez, sólo tal vez, deberíamos pensar en el otro. Si es que, realmente, existe "el otro".
A lo mejor, un día, descubrimos que ese "otro" que vemos, sólo es el reflejo de nosotros mismos: más hambriento, más desesperado, más dolido...
Que la vida iba en serio uno lo empieza a comprender más tarde -como todos los jóvenes, yo vine a llevarme la vida por delante.
Dejar huella quería y marcharme entre aplausos -envejecer, morir, eran tan sólo las dimensiones del teatro. Pero ha pasado el tiempo y la verdad desagradable asoma: envejecer, morir, es el único argumento de la obra.
Jaime Gil de Biedma
fue sin duda uno de los mejores poetas españoles. Y esta versión de Miguel Poveda es casi como un poema nuevo. Releer a Gil de Biedma es como un recuerdo. Es curioso que la juventud sólo nos parezca el lugar intenso del desconocimiento. Cuando los adultos vemos nuestro reflejo: ¿por qué es ahora cuando descubrimos que ya sabíamos?
Cuando teníamos 17 años, estos versos de Gil de Biedma invadieron nuestras vidas; como si allí hubieramos encontrado una verdad: "para saber de amor, para aprenderle, haber estado solo es necesario.Y es necesario en cuatrocientas noches -con cuatrocientos cuerpos diferentes- haber hecho el amor. Que sus misterios, como dijo el poeta, son del alma, pero un cuerpo es el libro en que se leen." Y años más tarde uno vuelve a releerla con la misma convicción desamparada: "ahí, hay una verdad".
Disfrutadlo.
martes, noviembre 03, 2009
No voy a pensar...
en que nunca limpia el exprimidor del zumo de naranja que se hace todas las mañanas y que yo me encuentro, cada noche, con los restos de la pulpa ya resecos, adheridos como fósil a las estrías del plástico. No voy a pensar en ello, no sea que a ella le dé por pensar en mí...
Levni (Lev) Yilmaz es el autor de esta animación. Una muestra más de que internet es una ventana por la que mirar a través de los ojos de otros. En su canal de "Tales of mere existence" podeís encontrar cientos. Desperdigados por YouTube tenéis un montón subtitulados. Este sería otro buen ejemplo.