Me quedo con esta frase:
"Nunca es nada como El Fin". La dice el anciano indio Hopi -Arizona- del vídeo que os enlazo hoy. Ver estos días que los autobuses públicos de medio mundo se usan para discutir sobre la existencia o no de Dios (o dios), con los agnósticos y los católicos mediando -al menos aquí, pero allí serán algunos islamistas atentando, allá unos judíos bombardeando... y suma y sigue...- ver eso, digo, me recuerda que la impúdica "sociedad del espectáculo" ha olvidado que nosotros, los humanos, somos los actores, no los espectadores, de esta obra que es la vida.
¿Dónde tenemos puesto nuestro límite?...
4 comentarios:
no importa el tiempo que pase, ni quienes sobrevivan a las barbaries, ni lo que sufran, las culturas que mantienen su vinculo con lo antiguo, con el ser profundo, con las raices, siempre mantendran su discurso inalterable, constante, firme, ¿¿¿no hace esto que los que olvidaron su identidad piensen en la verdad de sus palabras, de su sentir, de su saber???
Al menos ellos los acontecimientos que nos esperan podran vivirlos en paz, en armonia, porque asi lo dicta la razon del que sabe escuchar, mirar y comprender mas allá de su insignificante existencia en un universo inagotable.
Puto Guttunoski. Estás haciendo un gran blog tio. Me ha encantando esta entrada. Casualmente tiene un punto de P. Austeriano el haber visto este video... la importancia del agua... ya te dire que ahora no viene al caso. lo de la 1ª G.M.... k razón tiene. 1 abrazo.
Decis bien... y los dos.
Y, cierto, que razón tiene con lo de la I G.M.
Eres un krak, Matojos!
Un beso Anónima!
yo visualizado vida, compa. Para ahuyentar el miedo, o por lo menos equiilbrar un poco. La vida es tan corta que la tristeza es una pérdida de tiempo.
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